Después de 6 semanas de intensa actividad
Como ya sabemos la Educación Física, no es la Gimnasia que muchos han conocido sino una de las materias más importantes de la enseñanza obligatoria porque en ella se pueden trabajar prácticamente todas las Competencias Clave que imprescindibles para que el alumnado pueda progresar con garantías de éxito en su itinerario formativo, porque incluye El trabajo cooperativo y la adquisición de hábitos saludables (alimentación, higiene, aseo, ejercicio diario y actividad física en el tiempo de ocio) a través de La Gamificación (introducción del juego) de los saberes básicos (conocimientos, destrezas y aptitudes según la Lomloe), así como el conocimiento a través de expertos de diversas materias relacionadas con los saberes básicos de la Educación Física según la LOMLOE.
Los alumnos de primero de la ESO y los profesores hicieron una excursión al pico de Peñalara el pasado 10 de abril para dar por finalizado su proyecto: «Ascensión al Everest», que han trabajado desde distintas áreas.
Desde Biología, Geografía, Inglés y Educación Física han preparado diferentes situaciones de aprendizaje que puedan resultar más atractivas y motivadoras para el alumnado porque incluyen competencias específicas de sus respectivas materias, que sumadas a las propias de Educación Física permitirán la adquisición de gran cantidad de Saberes Básicos y, en definitiva, Destrezas y habilidades que son imprescindibles para seguir progresando con garantías de éxito a lo largo de toda su etapa educativa y de su vida.
El objetivo era llegar al pico más alto de Madrid, el pico de Peñalara.
Primero llegaron al colegio todos a las 8 de la mañana y esperaron a que llegara el autobús, a continuación se montaron todos, el trayecto duraría una hora y media hasta llegar a su destino. Unos hablaron durante el trayecto, otros se durmieron y también pusieron música, fue un trayecto divertido.
Cuando llegaron se bajaron todos del autobús y empezaron a andar. Estuvieron andando un rato, pasaron por caminos con muchas rocas, y ya algunos estaban cansados.
Hicieron una parada para poder quitarse alguna prenda de ropa, picotear algo y beber agua. También aprovecharon para poder ver las primeras vistas tan bonitas.
Cada vez estaban más alto, y se veía un paisaje precioso. Empezaron a ver nieve por donde andaban y algunos se las tiraban unos a otros, así la subida se hizo más amena.
Hicieron otra parada para poder almorzar, desde allí se veía todo lo que les faltaba por subir, cada vez estaban más cansados pero a la vez más motivados por llegar a la cima. Observaron un paisaje precioso, el cielo azul, las nubes, las montañas nevadas y los ruidos de los animales, eran unas vistas preciosas.
Cuando terminaron recogieron todo y empezaron a subir más, les motivaban ver todo lo que habían ya subido.
Tenían que hacer paradas para poder reunir al grupo y no tener tanta distancia entre unos y otros.
Ya habían llegado al primer pico, se hicieron unas fotos con las maravillosas vistas, y jugaron con la nieve, fue un momento muy divertido. Desde allí se podía ver Castilla y León.
Después de un rato llegaron al pico, y se alegraron por haber podido llegar todos, nadie se rindió. Allí comieron, porque ya todos tenían hambre, tuvieron 20 minutos para poder comer y disfrutar. Antes de irse se hicieron una foto grupal y empezaron a bajar. La bajada se hizo más fácil, pero la gente ya estaba más cansada y había más separación entre unos y otros.
Después de llegar todos abajo, se montaron en el autobús y volvieron a Alcalá de Henares a las 7 de la tarde.
Fue una excursión inolvidable, se lo pararon muy bien, nunca habían visto unos paisajes tan bonitos como los que vieron ese día.
Estaban orgullosos de haber alcanzado su objetivo, subieron 2.428 metros.
Crónica de María Bueno Gómez, alumna de 1º de ESO